Caminando entre ruinas

Siempre pensé que era fuerte quien no lloraba. Quien no mostraba su dolor ni su sufrimiento. Siempre asocié una sonrisa con la fuerza. El escuchar a los demás, darles tu hombro y ser capaz de escuchar sin decir "yo también me siento así, estoy igual de destrozada". El estar ahí antes de que te busquen. El ser soporte en vez de la persona ayudada.

En los peores momentos de mi vida mis lágrimas fueron muy pocas. Incluso recientemente cuando tuve que despedir a la persona más luchadora que he conocido, solo llegué a romperme en un momento. Fue porque creía que estaba apartada del resto. Pensé que nadie me veía y, sin embargo, alguien fue capaz de consolarme. Alguien con quien, a pesar de ser familia, nunca había tenido una conversación. Al fin y al cabo, aunque sonriésemos al recordar los buenos momentos, todos sentíamos el mismo dolor. De otras, ni siquiera fui capaz de despedirme.

Los superhéroes son los únicos que pueden mantener siempre esa imagen ideal. Los simples mortales tenemos nuestros baches. Podemos ser muy felices o estar muy tristes. Podemos ser felices y tener una angustia no compartida. Podemos estar tristes y tener pequeños momentos de alegría. No compartir entre nosotros lo que sentimos no nos hace diferentes al resto. Si conoces a una persona descubrirás que a lo largo de su vida ha pasado por situaciones muy similares a las tuyas.

De ahí que todos tengamos alguna canción que nos hace llorar o nos pone los pelos de punta, alguna película que verías mil veces y otras de las que no quieres ver ni el tráiler. Hay fases que todos tendremos que vivir tarde o temprano. No es fuerte quien no llora. Es fuerte quien es capaz de pasar por ellas y seguir adelante. Aunque se pase un año tumbado en el sofá llorando antes de volver a levantarse. Aunque nunca más vuelva a levantarse. Ser fuerte es conocer nuestros límites. Fuerte es toda persona que sigue viviendo, e incluso la que decide que ya lo ha hecho por demasiado tiempo. Somos fuertes por el simple hecho de existir. Por ser seres vivos capaz de reconocer nuestra propia existencia. Cuando pases por momentos duros, nunca olvides todo lo que ya has superado. Eres fuerte por ser como eres.
Con la tecnología de Blogger.