Retomar viejos hábitos


Hay sueños que se detienen por un rato. Los ponemos en pausa esperando el momento ideal para retomarlos. Creemos que ahora estamos demasiado ocupados y seguro que en unos pocos años tendremos más tiempo libre. A veces los olvidamos para siempre, otras veces volvemos a ellos.

Alargamos los plazos, creyendo que luego será sencillo retomarlos. Los años se convierten en décadas. Un día, al fin llega el momento. Volver a buscar la caja de los proyectos apartados para encontrar que ya no reconocemos lo que se encuentra dentro. Todo lo que esperábamos se ha deshecho. Intentas buscar las conexiones, pero todo se ha convertido en un puzzle. Parece imposible volver a montarlo. Pasan muchas horas solo para recordar por qué cada cosa está en cada lugar. Puede que te preguntes si has llegado demasiado tarde. Antes eras capaz, ahora solo ves un caos sin solución.

Los comienzos nunca fueron sencillos, mucho menos los regresos. Miras hacia atrás y lo recuerdas como algo sencillo. Crees que antes no te costaba nada hacerlo. Pero, no es así. Olvidas que para ser así de bueno tuviste que practicar durante mucho tiempo. No creas a quien te diga que eso nunca se olvida. Tras la inactividad, va a ser difícil volver a cogerle el truco. Lo has hecho antes. Tendrás que pasar muchas noches despierto hasta la madrugada intentado recordar los hilos que conseguían que todo encajase.

No te rindas. Si de verdad te gusta algo qué más da todos los obstáculos que tengas que superar. Sigue luchando y no escuches a los que intentan desanimarte. Ni siquiera a ti mismo. Que no sea porque no lo has intentado, porque eso sí que puedes hacerlo, ¿verdad?
Con la tecnología de Blogger.