DomingosDeOpinión | Cómo estudiar lo que te gusta y sobrevivir II
Imagina que quieres estudiar una carrera que desde que eres un niño te llama la atención. En tu ciudad la puedes escoger, pero tiene una nota de corte muy alta. Con ese objetivo estudias como nunca para sacar en todas las asignaturas sobresalientes. Te esfuerzas todavía más para que tu prueba de acceso a la universidad sea perfecta. Consigues esa nota que necesitabas e, incluso, la superas. Puedes presentar la solicitud sabiendo que muy mala suerte tienes que tener para no conseguir estar dentro. Al tiempo te llega el aviso de que te han aceptado en la primera lista de admitidos. Enhorabuena, puede realizar su matrícula en Periodismo.
Con esa ilusión de estar cumpliendo tus sueños llegas el primer día a la presentación de la que será tu profesión. Algunas familiares te habían advertido de que esa no era la mejor opción, mas no vas a dejar que otros decidan aquello a lo que tantas horas le vas a dedicar. Estás ahí, empiezas a conocer compañeros que llegan con las mismas ganas que tú. Hasta que algo en tu cara empieza a cambiar. Los profesores no hablan de la belleza de la comunicación, tampoco de la responsabilidad social y democrática que tendrás. No, hablan de la precariedad laboral con la que te vas a encontrar y de las altas tasas de paro. Tu gozo en un pozo.
No has ni empezado y ya te han arruinado la alegría. Con lo que te costó llegar hasta ahí. Te replanteas tu decisión y ves como algunos compañeros se quedan por el camino. Cuando empiezan las clases más de lo mismo. Son más los profesionales que te dicen que la has fastidiado que los que te muestran la senda a seguir. Alguno hasta te dice que el Periodismo ya ha muerto, al igual que los periódicos. Pero, hay algunos que ven más allá. Te ayudan a comprender que no va a ser fácil y que no te vas a hacer millonario, pero que si de verdad amas lo que hacer nada de eso te importará. Tienes la capacidad de cambiar las cosas y de poner tu granito para construir un lugar mejor.
Muchas veces tus jefes ignorarán tus reportajes. Puede que estos choquen con la línea editorial o con los intereses de los anunciantes. Serán muchas las ideas que no tengan cabida en los medios tradicionales. Hemos nacido en la era digital. Eso ya para nosotros no debería ser un problema. Cuando al fin llegas al momento de tu graduación estás inmunizado contra las desgracias de los periodistas. Ya las has escuchado tantas veces que sabes que podrás con ellas. No te sorprenderán. Qué lejos queda todavía Ítaca. Sabes que ahora empieza un largo recorrido, pero rendirse nunca ha sido una opción. Al contrario, te da fuerzas para prepararte más y poder algún día gritarles: “sí, me dediqué al Periodismo pese a que intentasteis que lo dejara y he sobrevivido”.
